La conductora habló de su diagnóstico incurable y reveló que solo Dios decidirá su final.
Ciudad de México. Yolanda Andrade volvió a aparecer públicamente en medio de la preocupación por su estado de salud. La conductora sorprendió al decir que presuntamente fue víctima de brujería.
Fue a principios de agosto cuando Andrade decidió hablar con franqueza sobre el difícil diagnóstico que recibió. La presentadora, de 53 años, explicó que los médicos le confirmaron que sus padecimientos no tienen cura:
“Tengo dos diagnósticos y los dos no tienen cura. En conclusión, médicamente y científicamente, me puedo morir antes que ustedes, pero eso lo decide Dios”.
Aunque asegura que no le teme a la muerte, admitió sentirse cansada y harta de los tratamientos que recibe.
Yolanda Andrade revela pronóstico de vida
Durante un encuentro con la prensa el pasado 11 de septiembre, Yolanda Andrade, de 53 años, decidió sincerarse frente a la prensa sobre su estado de salud.
La actriz dijo que sus médicos le dieron una estimación concreta sobre su pronóstico de vida.
“El doctor me dijo [que voy a vivir] de tres a cinco años, que dura mi enfermedad”.
A pesar de la dureza de esta declaración, la conductora la compartió con serenidad. Incluso detalló que ya tomó precauciones legales y personales: “Yo lo hice [mi testamento] el año pasado, antepasado”.
Aunque evitó dar detalles sobre quiénes serán sus herederos, recalcó que ha tomado las medidas necesarias para que no existan conflictos cuando ya no esté.
“Ya no le tengo miedo a la muerte”: Yolanda Andrade
Lejos de mostrar temor, Andrade explicó que su visión de la muerte cambió a raíz de su situación médica.
“No le tengo miedo a la muerte, claro que no”, señaló con convicción. Explicó que, gracias a procesos terapéuticos, ha aprendido a aceptar la inevitabilidad del final:
“Me he terapeado un chorro porque de todas maneras nos vamos a morir todos”.
Más aún, confesó que, al conocer los detalles de cómo podría llegar ese momento, ya no siente angustia:
“Como ya me dijeron cómo [voy a morir], entonces ya no le tengo miedo, ya la veo venir y ya es mejor disfrutarla”.
Aunque se mostró tranquila respecto a la muerte, no ocultó lo difícil que ha sido el proceso médico. Reconoció que los tratamientos le han quitado energía y paciencia:
“Estoy en tratamiento de todo, estoy verdaderamente harta. A veces me desespero, pero tengo que aprovechar lo más que pueda”.
Con su característico humor, narró una anécdota con su doctor, quien le recomendó dejar ciertos alimentos. “Dice: ‘No comas esto, no comas lo otro’. Y ya le dije: ‘Doctor, ya cómo ching… me voy a ching… unos taquitos de cochinita pibil’”, relató, mostrando que aún conserva el sentido del humor en medio de la adversidad.
Momentos críticos de Yolanda Andrade; así logró recuperase
La presentadora también relató momentos críticos que vivió a causa de la enfermedad.
“Llegué a estar inmóvil en una cama”, recordó. “Pelaba los ojos, lloraba y decía: ‘Diosito santo, ¿así me voy a quedar?’”.
Afortunadamente, logró salir de esa crisis con ayuda médica especializada: “Encontré un doctor que me ayudó a caminar y a hablar”, explicó, aunque admitió que todavía conserva algunas dificultades al expresarse.
Más allá de los tratamientos, Andrade aseguró que su fe se ha fortalecido en este proceso. Con un tono entre serio y cómico, compartió:
“He rezado más que una Carmelita descalza, casi me meto en un convento”.
Explicó que mantiene cercanía con la espiritualidad y que incluso tiene “santitos” que la acompañan en sus oraciones. Sobre su vida, fue tajante:
“Viví a lo máximo, me divertí muchísimo y cumplí todos mis sueños”.
La conductora reflexionó sobre su vida y afirmó que no tiene arrepentimientos: “Viví a lo máximo, me divertí muchísimo y cumplí todos mis sueños”.
Yolanda Andrade confirma que fue víctima de brujería
En su reaparición pública, Andrade habló de un tema inesperado: la brujería. Durante la misa conmemorativa de Silvia Pinal, admitió que alguna vez fue víctima de este tipo de prácticas:
“Yo no creía en la brujería. Hay cosas que cuestan trabajo creer, pero no quiere decir que no existan”.
Incluso, relató con ironía que llegó a conocer a una mujer que se decía bruja:
“Pasaba por mi casa en una escoba y un día le pedí de favor que ya me dejara en paz con eso, que no estaba bien. Esas cosas se regresan y que, por favor, me dejara en paz”.
Uno de los momentos más tensos de la entrevista se produjo cuando los reporteros le preguntaron si la brujería de la que habló estaba relacionada con alguna persona del medio.
“Yo no voy a dar nombres de nada. Yo te dije que había una bruja. Hay una brujita por ahí… Sí tiene nombre, claro”.
Aunque evitó confirmarlo, dejó en claro que cree en una justicia superior:
“La justicia divina existe y toda la gente que reza por mí contra eso. Diosito sabe qué onda y lo más triste de todo es que eso se va de reversa y en lo que más te duela”.
Con información de Excélsior.