Marcha pacífica contra la gentrificación concluye con actos vandálicos en CU

por El Sureste

Ciudad de México. La segunda marcha contra la gentrificación en la Ciudad de México, culminó con actos vandálicos en estaciones del Metrobús, así como en el Museo Univesitario de Arte Contemporáneo (MUAC), donde un grupo de encapuchados rompió vidrios luego de que la caminata se desarrollara de manera pacífica.

De acuerdo con las autoridades, la marcha reunió a 600 personas; fue mayoritariamente pacífica, y se registraron tres atenciones médicas, incluida a una mujer a quien arrojaron una piedra, sin que ameritaran traslado hospitalario.

Pasadas las 14:30 horas, los manifestantes comenzaron a arribar a las inmediaciones del Metrobús Fuentes Brotantes, donde más de 20 colectivos partieron con dirección al Caminero.

Encabezados por pueblos originarios de Santa Úrsula Xitla, señalaron como principal consigna que se cancele el megaproyecto inmobiliario de Fuentes Brotantes 134, debido a que representa un impacto social, cultural y ambiental.

Lo que hoy llaman gentrificación es un despojo de nuestros bienes comunes, señalaron los inconformes.

Sin embargo, a los contingentes pacíficos se sumó un grupo de jóvenes, algunos encapuchados, quienes buscaron desde el primer momento liderar la marcha, pero no pudieron.

Los organizadores, quienes usaron brazaletes naranja, pidieron que se escuchara a los pueblos originarios para que ellos lideraran el contingente, lo que generó molestia entre el resto de los participantes.

Tras una hora de posicionamientos, cerca de las 16 horas, el contingente salió con los pobladores de Santa Úrsula Xitla a la cabeza, seguidos de adultos mayores, y al final colectivos en general.

Antes de partir, hicieron un llamado a que la marcha fuera pacífica, pues era petición de los afectados por el megaproyecto, quienes responsabilizaron a las empresas Azimuth y Graus de criminalizar y amenazar al pueblo.

Otros discursos enfatizaron que los megaproyectos generan gen-trificación en alcaldías como Coyoacán, Tlalpan, Xochimilco, Gustavo A. Madero y Azcapotzalco, en-tre otras.

Los negocios fueron cerrados para evitar que los atracaran e incluso uno colocó una pancarta para protegerse que especificaba: Negocio familiar mexicano.

Luego de hora y media de protesta, los manifestantes retornaron hacia Fuentes Brotantes, donde poco a poco los participantes pacíficos se fueron dispersando.

En tanto, la policía capitalina acompañó a los inconformes que reventaron la protesta a la altura del Metrobús Perisur con agresiones a los uniformados y actos vandálicos en la estación.

Este grupo de encapuchados ingresó a Ciudad Universitaria sin que los elementos policiales los siguieran, debido que no es parte de su jurisdicción. Ahí rompieron cristales del Museo de Arte Contemporáneo (MUAC) y pintaron casetas de vigilancia UNAM.

Posteriormente, irrumpieron en la librería Julio Torri, donde destrozaron libros.

Información de La Jornada.

Más noticias interesantes