La Fiscalía General del Estado logró frustrar dos casos de presunto secuestro virtual en los municipios de Othón P. Blanco y Bacalar, mediante la intervención de elementos de la Policía de Investigación. Gracias a la pronta denuncia de familiares, se evitó que los responsables obtuvieran depósitos de dinero y se localizó sanas y salvas a las víctimas, un hombre y una mujer, quienes fueron manipulados a través de llamadas telefónicas.
En el primer caso, ocurrido en Chetumal, una mujer fue contactada por presuntos delincuentes que le informaron que su hijo de 19 años había sido secuestrado, junto con otras personas, por presuntamente haber tomado una fotografía que comprometía a un supuesto líder criminal. En un intento de extorsión, exigieron 300 mil pesos, que luego redujeron a 60 mil. Mientras se realizaban las llamadas, la familia alertó a las autoridades, quienes les indicaron no realizar ningún depósito y rastrearon la llamada hasta el penal de Altamira, Tamaulipas. El joven fue localizado ileso en un centro comercial de la ciudad.
El segundo caso se registró en Bacalar, donde un hombre recibió una llamada en la que le informaron que su esposa había sido secuestrada bajo el mismo argumento. Los extorsionadores exigieron un pago inicial de 300 mil pesos, que posteriormente bajó a 50 mil. El afectado acudió a la agencia del Ministerio Público, donde recibió acompañamiento por parte del personal de la Fiscalía, que nuevamente detectó que la llamada provenía del penal de Altamira. La mujer fue localizada a salvo fuera de un hotel del municipio, donde los supuestos secuestradores le habían indicado que esperara instrucciones de una supuesta licenciada.
La Fiscalía General del Estado reiteró el llamado a la ciudadanía a denunciar de inmediato cualquier intento de extorsión telefónica y evitar entregar dinero o seguir instrucciones de números desconocidos.
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