CDMX – El América cerró como líder el torneo Apertura gracias a los 38 puntos a los que llegó tras vencer 2-1 al siempre correoso Puebla, aunque se quedó con las ganas de tener a un nuevo campeón de goleo, a pesar de que esta noche jugó para Henri Martín, hoy incapaz de amenazar al lider Nicolás Ibáñez (11 goles del argentino por 10 del mexicano).
Porque el yucateco no se puede quejar de falta de apoyo en una noche diseñada para él, pero que acabó con vítores para Martínez autor de u gol superlativo, el cual los antiamericanistas criticarán afirmando que trató de centrar. Como sea, pero con ese tanto las Águilas ganaron un juego durísimo.
El equipo de Fernando Ortiz llegó al Cuauhtémoc con la intención de mostrar su poderío, por lo que regaló cerca de 25 minutos de alta calidad en los que logró arrinconar al siempre complicado equipo camotero, al grado de marcar un gol. Si bien no fue una acción colectiva para resaltar, el equipo azulcrema mostró otro factor por el que debe ser tomado con toda cautela, ya que se valió de una genialidad para mover los cartones.
Tras un saque de banda al minuto 12 Roger Martínez sorprendió con una pintura; parecía que centraría al dar la vuelta, pero le pegó fuerte y el balón se fue a meter en el ángulo superior derecho.
Chulada que debe ser vista cuantas veces se pueda. Superados en recursos, los de casa fueron obligados a replegarse para no recibir más daño y a la espera de empezar a mover sus líneas, consientes de que el América no mantendría su alto nivel todo el partido. Y sería gracias a Maximiliano Araújo que lograría sacudirse la presión, ya que al minuto 24 logró taladrar por la banda izquierda para soltar un disparo que Ochoa apenas atajó.
A partir de entonces se vio otro partido, en el que la Franja fue capaz de competirle a su potente rival, ya que además de Araújo empezaron a jugar Omar Fernández, Federico Mancuello y Jordi Cortizo, lo que alejó el cuero lejos de su zona baja.
En la complementaria los del Tano intentaron regresar al rendimientos del inicio del partido, lo cual lograron con una gran presión en la parte media, lo que les dio para armar un par de opciones, una de ellas hecha para Henry Martín, quien quería el título de goleo.
En ella, al minuto54, el del América se hizo de un hueco dentro del área para fusilar a Anthony Silva, pero el paraguayo mandó el balón a tiro de esquina. Sin embargo, esta vez los de casa no se dejaron agobiar y de inmediato equilibraron para incluso generar su más clara en el partido, de nuevo con intervención de Araújo, -un demonio esta noche- quien tras ser asistido por Cortizo sacó un tiro que besó la línea de meta de Ochoa.
Fue una segunda mitad en la que cualquiera pudo anotar, apenas cargado hacia un América que buscó cada vez que pudo a Martín, sin que éste tuviera oportunidad de marcar, aunque sí lo hizo Álvaro Fidalgo y acercó Luis Reyes para el visitante. Faltó la cereza para los de Coapa tras una fase regular en la que dejaron bien claro que hoy son los máximos favoritos al título.
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